Ayer llegamos al Campo Base del K2, a 5100 metros de altura. Durante toda la semana fue imposible establecer ningún tipo de comunicación por lo extremadamente aislada que está esta región.
El martes pasado, horas antes de abandonar Skardu, recibí una emotiva llamada del viceembajador de España en Pakistán que quiso desearme suerte personalmente. No lo esperaba y resultó reconfortante y motivador. El miércoles llegamos a Askole tras casi 10 horas de viaje en todoterreno y el jueves empezamos a caminar con rumbo Este hacia Jola. El viernes alcanzamos Payu, en el extremo occidental del glaciar Baltoro, donde nos tomamos el sábado de descanso.
El domingo reemprendimos la marcha y seguimos ganando altura. Caminando ya sobre el glaciar llegamos a Urdukas y en los dos días siguientes dejamos atrás las bases de acampada de Gorp 1, Gorp 2 y Concordia.
Fue duro, pero estoy sana, contenta de verme en el Campo Base y fuerte. Me vienen a la memoria imágenes y recuerdos de 1997 cuando estuve aquí camino del Gasherbrum (que se encuentra aún más lejos, en el fondo del valle del Baltoro).
El grupo se ha dividido; parte de los que empezamos la marcha han seguido hacia los Gasherbrum y parte se han desviado hacia el Broad Peak, por lo que ya sólo quedamos los ocho montañeros con los ocho sherpas que vamos a por el K2. Y todos tenemos ganas de escalar; creo que mañana mismo empezaremos a tomarle el pulso a la montaña y haremos una primera subida de aclimatación y reconocimiento en la que incluso, si todo se pone bien, no descartamos alcanzar el Campo I a 6100 metros de altura.
Dicen que el pronóstico del tiempo nos concederá uno o dos días de calma antes de que se presente un frente complicado que posiblemente nos obligue a refugiarnos en el Campo Base. Eso se irá viendo, de momento la moral está alta y las cosas parecen marchar según lo previsto.
Aunque no es nada fácil intentaré por todos los medios mantener este cauce de comunicación y teneros informados de nuestros progresos.
Un abrazo enorme y muchas gracias por tantos mensajes de ánimo.
Ahora comienza la diversión, disfruta una vez mas de esos espectaculares paisajes que da esa cordillera. Un abrazo grande para ti y tus otros siete colegas. VAMOSSSS, «despacito y por las piedras», siguiéndote momento a momento. A cuidarse!!
Animo rosa estoy seguro que puedes como siempre un ejemplo para todos un abrazo
Hola amiga te deseo toda la suerte del mundo esta nueva y emocionante aventura, deseo también que sea un gran éxito y verte de nuevo por El Moriscal para darte un abrazo muy grande. Babia está contigo.